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Ad portas de Rusia 2018 parece un buen momento para realizar un ranking sobre los 10 mejores jugadores que hayan destacado en los mundiales. Mi lista es la siguiente, en orden inverso.

10 Rossi

La selección italiana de 1978 no es de las más recordadas en la historia del fútbol. Pero hizo un fútbol agradable y terminó cuarta. En aquella selección destacó un joven, Paolo Rossi, que al lado de Bettega logró ser una de las duplas ofensivas más importantes del mundial argentino. Si bien la figura de aquel Mundial fue Kempes, en el agregado del ´78 y ´82 el mejor fue Paolo Rossi. Kempes, quien también había participado con poco éxito en 1974, pasó prácticamente desapercibido en el Mundial de España.

Paolo Rossi, en cambio, la bordó en España a pesar de haber estado suspendido hasta pocos meses antes del mundial y tener a toda la prensa en contra durante su silencioso paso por la primera fase. Frente al mejor Brasil desde Pelé, el de Zico, Socrates, Toninho Cerezo y Falcao, Rossi despertó. Para mí, y quizás para la mayor parte de mi generación, aquel fue el mejor Brasil que hayamos visto. Y ante ese equipo de monstruos, Paolo Rossi marcó un hat trick que aún hoy me duele en el corazón. Ese partido, ese mundial, hace que Rossi esté en el top ten.

9 Zidane

Para mí, globalmente, el mejor jugador francés de la historia es Michel Platini. Futbolísticamente hablando fue un mago del centro del campo. Me encantaba, debo reconocerlo, esa manía de jugar con la camisa por fuera. En eso lo copié durante toda mi “carrera” futbolística. Platini hizo dos grandes mundiales, pero Zidane ganó uno y lo bordó en un partido de otro mundial. Él y no Platini, llegó a dos finales. Él y no Platini quedó campeón.

Zidane, hoy día el calmado exentrenador del Real Madrid, fue expulsado en el segundo partido de Francia en 1998. Un pisotón y a la calle. No estuvo presente en el partido frente a Paraguay, el día que los guaraníes demostraron que el fútbol defensivo, en ocasiones, también puede ser arte. Zidane regresó en cuartos y comenzó a demostrar ser el líder que toda Francia esperaba que fuera. Pero en la final, con Ronaldo enfermo o no, Zidane marcó dos goles, de cabeza, y llevó a Francia al título mundial.

Lo que lo encumbra, desde mi punto de vista, es el partido ante Brasil en 2006. Habiendo anunciado su retirada tras el mundial, Francia debió enfrentarse a una poderosa Brasil (más por nombre que por juego, eso sí) en cuartos de final. Zidane aquel día jugó su mejor partido en mundiales. Él amarró el balón y tuvo a Roberto Carlos, Kaka, Ronaldinho y Ronaldo corriendo detrás de su elegante zancada. En la final, ante Italia, su carácter emergió nuevamente y se retiró expulsado de los mundiales. Pero aquel título y aquel partido lo colocan entre los mejores de siempre.

8 Meazza

El italiano es leyenda. Ganó el Mundial de 1934, que si bien contó con la inestimable colaboración del régimen fascista, también tuvo en el campo a un jugador del que Vittorio Pozzo, entrenador de la azurra, decía que gracias a él se comenzaba ganando 1-0. En cualquier caso, si quedaron dudas de la victoria italiana en el ’34, en Francia 1938 Italia y Meazza lograron un segundo triunfo. Meazza, entonces capitán, marcó el segundo de Italia en el decisivo partido semifinal ante la Brasil de un ausente Leónidas. Líder de un bicampeón mundial lo coloca en el top ten

7 Ronaldo

Es bicampeón del mundo, si bien en 1994 no llegó a debutar. Pero incluyendo el Mundial 2006 logró la impresionante cifra de 15 goles, sólo detrás de Klose, el alemán de los 16 goles. Ronaldo fue la estrella brasileña en 1998 y 2002. En 1998 Brasil iba disparado al título. Si bien Francia no sería rival fácil, yo no dudaba que el triunfo sería sudamericano. Pero le dio aquel patatús. Afirma él que se acostó a descansar después del almuerzo y hasta ahí recuerda. Convulsionó y mareado (dicen que presionado por patrocinadores) Ronaldo jugó la final. No hizo nada, como tampoco el resto de Brasil.

Su desquite llegó en Corea y Japón 2002. Ronaldo fue la estrella del torneo y con 2 goles a Kahn, declarado mejor jugador del Mundial, Brasil derrotó a Alemania en la final. En 2006 participó, marcó algunos goles, pero gordo y fuera de forma no podía ofrecer su mejor versión. Su elegancia goleadora, su velocidad y su aporte al fútbol ofensivo lo ubican arriba en el escalafón.

6 Cruyff

El único de la lista con un solo mundial encima. Y nunca fue campeón del mundo. Para mí Cruyff es uno de los cinco mejores jugadores de la historia. Pero no de los mundiales. Sin embargo está en lista porque su fútbol único marcó más de una generación. Fue el líder de un equipo que debió ser campeón del mundo, pero que como Hungría 20 años atrás, no pudo rematar a una consistente selección alemana.

Nadie dirá que Alemania no fue justa vencedora del mundial 1974. Pero la historia recuerda el fútbol bello, así no gane. Pasó con Hungría en el ’54, pasó con Holanda en el ’74, y nuevamente pasó en 1982, aquella vez con Brasil. El líder húngaro, Puskas, fue roto por un salvaje defensa alemán en primera fase. De no ser por aquello, quizás estaría en este listado. El brasileño, Zico, no pudo compensar la mediocridad del eslabón débil, Serginho. De no ser por aquel, quizás estaría en el listado.

Pero Cruyff sí jugó todo el torneo y llegó desparramando rivales a la final. Es Cruyff, el mejor de los que no ganaron. Su fútbol completo da para estar entre los mejores de siempre en los mundiales.

5 Obdulio Varela

Obdulio Varela fue el líder de Uruguay en el Maracanazo. Sólo por eso, debería estar en esta lista. El “Negro Jefe” lideró un equipo que ganó un partido imposible de ganar. La historia estaba escrita, Brasil era el Campeón del Mundo de 1950. Pero bajo la batuta de Obdulio, Uruguay ganó aquel partido, aquel mundial.

Además del ’50, Varela fue parte del combinado celeste que le marcó 7 a los escoceses y 4 a los ingleses en Suiza 1954. Ante Inglaterra, en cuartos de final, Obdulio se lesionó al festejar el gol. Quizás sea coincidencia, pero jamás Uruguay había perdido un partido en mundiales. Lo hizo, heroicamente eso sí, en semifinales del ’54, ante la poderosa Hungría; cuando el “Negro Jefe” no estaba para comandar la remontada. El líder de la mayor sorpresa de los mundiales está en el top five.

4 Garrincha

Garrincha, “la alegría del pueblo” es para muchos en Brasil, el mejor de la historia. En mundiales su historia comienza, como la de Pelé, en aquel tercer partido de primera fase en Suecia 1958. Pelé, con sus 17 años, se llevó la gloria, pero fue Garrincha quien armó los dos goles de Vavá en la final. Lo hizo como lo haría siempre: desbordando y centrando.

En Chile 1962, tras la lesión de Pelé, Garrincha tomó la batuta del equipo campeón del mundo. Aquel fue su mundial, el de Garrincha. Ante Inglaterra en cuartos disputó uno de los más espectaculares partidos que se le recuerden, golazo incluido. Excluyendo la final, Garrincha demostró en aquel Mundial que bajo su liderazgo Brasil también podía ser el mejor.

3 Beckenbauer

Jugó 3 mundiales. En todos destacó, En Inglaterra 1966 demostró al mundo la elegancia jugando desde la mitad. Después haría historia saliendo desde atrás. Schön, entrenador alemán, incomprensiblemente lo mandó a perseguir a Bobby Charlton en la final de Wembley. Si bien logró su cometido, Alemania perdió la sorpresa y la profundidad que había demostrado a lo largo de todo el torneo. Aun así, sólo un gol polémico le dio la victoria a los ingleses.

En 1970, se lesionó el hombro ante Italia en semifinales. Su imagen jugando con el hombro dislocado y vendado es icónica en los mundiales. Pero su bravura no fue suficiente, y de la mano de Gigi Riva y Gianni Rivera, Italia apeó a Alemania en un histórico 4-3.

Tuvo que esperar a 1974 para celebrar. Entonces ni Lato, el polaco goleador del torneo, ni Cruyff pudieron evitar que por fin Beckenbauer celebrase un título mundial. Está en el podio porque en los tres mundiales que jugó estuvo siempre entre los mejores.

2 Maradona

¿Qué decir? Brilló como nadie en 1986, particularmente en cuartos de final. Un gol que valía por dos, él eliminó a Inglaterra. Dos actos de magia adicionales eliminaron a Bélgica en semifinales. La final, aunque poco participativo respecto a lo que había hecho en partidos anteriores, fue argentina porque Maradona logró filtrar un pase mágico a Burruchaga para que éste alcanzase in extremis un balón que había alargado demasiado.

Antes, en Italia ‘82 había fallado ante Italia y Brasil. En Italia ’90, el mundial más triste de los que he tenido oportunidad de ver, Maradona estuvo acorde al torneo. Salvo aquella jugada ante Brasil, donde el miedo a su pasado atrajo a más jugadores rivales de los necesarios, dejando sólo a Caniggia, Maradona poco, muy poco mostró. Quizás más demostró en 1994, pero las pruebas antidoping lo dejaron por fuera para siempre.

Sus obras de arte en México 1986 lo sitúan casi en el tope de la lista. Pero no llega a tanto, le faltó consistencia. El mejor es Pelé.

1 Pelé

Edson Arantes do Nascimento fue tres veces campeón del mundo. Sí, en Chile 1962 apenas pudo jugar un par de partidos. Le alcanzó para marcar un gol. En Inglaterra 1966 fue objeto de una cacería típica de las islas británicas. Quizás lo confundieron con un zorro de esos que tanto gusta de cazar la nobleza británica.

Pero en 1958 y 1970 Pelé fue el mejor. Es el único de la lista que ha sido el mejor en dos mundiales. En este sentido Meazza se le acerca. Pero es que en Italia 1934 pasaron tantas cosas raras. Nadie, ni Maradona, ni Beckenbauer lograron ser el mejor jugador del Mundial, marcar en dos finales y liderar a su equipo a la conquista del mayor torneo del mundo. Pelé es desde mi punto de vista, el mejor jugador de los mundiales de fútbol. Es el mejor jugador de siempre.

¿Estamos de acuerdo?