1 gol lleva Cristiano Ronaldo. 1 gol en doce jornadas. 1 gol en ocho partidos que ha jugado. La mayor leyenda del Real Madrid desde Di Stéfano está irreconocible. ¿Qué sucede? Más allá de la edad, la velocidad, los compañeros, los datos muestran que Cristiano está temporada está recibiendo el balón escorado a la derecha. Antes llegaba desde la izquierda.

Ronaldo siempre ha sido una maquina de disparar. Considere la Figura 1. En la temporada 2015-16 realizó 212 disparos. La temporada pasada, en 2016-17 hizo 126 disparos. El porcentaje de acierto de tiros al arco cayó ligeramente entre una temporada y otra pasando de 56,9% a 51,6%. También es cierto que hace dos temporadas disparaba más desde fuera del área (36,8%) que en 2016-17 (29,8%).

En la presente temporada, con 8 partidos jugados, la Figura 2 ilustra la intención de ataque de Cristiano Ronaldo. A la fecha ha realizado 32 disparos, 40,6% de ellos dirigidos al arco. Nueve puntos menos que en la temporada anterior y más de dieciseís puntos menos que hace dos temporadas. Aunque ligeramente, también dispara menos desde fuera del área.

El diagnóstico es relativamente directo. Cristiano sigue disparando mucho, pero su precisión cae. La Figura 1 muestra que Ronaldo en 2015-16 realizó casi el 58% de sus disparos desde la zona izquierda del campo. La Figura 2 muestra que en 2016-17 dispara el 50%. En la presente temporada, los números cambiaron radicalmente. El 37,5% de los disparos los realiza desde la zona izquierda.

La Figura 3 ilustra en el panel de la izquierda la posición desde la cual realizó pases Ronaldo durante la temporada 2015-16. Montados sobre un mapa de calor, se observa con claridad que el jugador se escora por la izquierda. La recepción de pases, mostrado en el panel de la derecha, muestra lo mismo.

La Figura 4 refuerza lo detallado en la Figura 3. Llegando por la izquierda es que ha alcanzado la gloria.

La Figura 5, para la temporada 2017-18, muestra que Ronaldo no se está moviendo igual que en temporadas anteriores. El panel de la izquierda ilustra como está pasando más desde la izquierda. El cambio es aún más notorio en el panel de la derecha. Ronaldo está recibiendo los pases en un sector del campo diferente al del año pasado: mucho más centrado. Quizás por ello no extrañe que mientras en 2015-16 disparaba en promedio 5,88 veces por partido y en 2016-17, 4,34 veces por partido, en la temporada actual, disputados 8 partidos, apenas dispara 4 veces por partido. El problema de Ronaldo es de ubicación porque en el último tercio, el número de balones que recibe se ha mantenido relativamente constante.

Ronaldo no está haciendo lo mismo con el esférico cuando lo recibe que en temporadas pasada. Zidane debería pensar si el problema es él, o Cristiano.