Tags: Atlético de Madrid; Bayern Munich; Champions League; Concentración de ingresos; Manchester City; Real Madrid
Atlético de Madrid – Bayern Munich. Manchester City – Real Madrid. Las semifinales de la Champions League la disputan dos equipos de España, uno de Alemania y uno inglés. Nada sorprendente. Desde la primera edición de la Copa de Europa en 1955⁄56 siempre ha habido al menos un equipo de estos países o Italia. En sólo 5 ediciones no ha habido al menos un equipo español, alemán o inglés. La última en la temporada 1995⁄96. Hace ya 20 años.
Seguir a @golyfutbol{.twitter-follow-button}
El país más exitoso en Copas de Europa es España. De 244 cupos en semifinales entre la primera edición y la 2015⁄16, 53 han sido para equipos españoles (22%), 16% ingleses, 15% italianos, 13% alemanes, 6% franceses, 5% holandeses y 4% portugueses. Es decir, el 66% de los semifinalistas provienen históricamente de las cuatro grandes ligas. Adicionando países relativamente exitosos como Francia, Holanda y Portugal, se concluye que el 81% de los semifinalistas se originan en apenas en 7 países.
Con dificultades en su primera edición –cuando el Chelsea rechazó la invitación–, el espíritu de la Copa de Europa era desarrollar una competición entre los mejores equipos de cada liga. Por ello en sus primeras ediciones equipos hoy casi desconocidos fueron protagonistas en Europa. Stade Reims, Eintracht o Partizan jugaron finales en los años 60. El Vasas húngaro, FC Zurich o el Dundee escocés disputaron semifinales.
Hasta 1969⁄70, el 72% de los semifinalistas provenían de las 7 grandes ligas (55% de Alemania, España, Inglaterra e Italia). La cifra se mantuvo a medida que en los 70 y 80 se consolidaba el torneo. Hasta 1991⁄92 el 69% de los equipos provenían de los 7 grandes (53% de los cuatro grandes). En 1992⁄93 se estrenó la Champions League con sus multimillonarios contratos de televisión. Pero aún competían sólo los campeones de liga o el campeón de año anterior si no conquistaba la liga. Así el Nottingham Forest es el único equipo que ha ganado más Copas de Europa (2) que ligas (1).
El torneo continuó siendo exclusivo para campeones hasta que en la temporada 1997⁄98 se abrió cupo a los subcampeones de las 8 mejores ligas. Poco antes, 1996⁄97, entró en vigor la Ley Bosman por la cual cualquier jugador de la Unión Europea no ocupaba plaza de extranjero en cualquier país de la Unión. Los cambios fueron notables. Entre 1992⁄93 y 1996⁄97 el 85% de los semifinalistas llegaron de las 7 grandes ligas.
En 1999-2000, impulsado por las grandes ligas de Europa, se amplió el número de participantes en la Champions League permitiendo hasta 4 participantes de las mejores ligas. Desde aquel año el 100% de los semifinalistas se originan en las 7 grandes ligas; el 94% provienen de las 4 grandes.
La gráfica ilustra el proceso por quinquenios. Las 7 grandes ligas, hasta mediados de los noventa, siempre representaban aproximadamente 3 de cada 4 semifinalistas. Las 4 grandes ligas rondaban, en promedio, 2 de cada 4 semifinalistas. Incluso en los 90 se daban casos como el de la temporada 1992⁄93 en la cual el Olympique y el Milan eliminaron en semifinales al Glasgow Rangers y al Goteborg. La Ley Bosman primero y la ampliación de la Champions League después llevaron a que todos los equipos, desde hace 16 años provenga de las 7 grandes ligas. El último equipo no alemán, español, inglés o italiano en jugar las semifinales fue el PSV Eindhoven en 2005. Hace más de una década!
El fútbol que se verá en las semifinales de la Champions será de alto calibre. Pero la certeza que a semifinales (y casi que a cuartos) llegarán siempre los mismos hace del torneo de la Champions un evento cuyas primeras rondas son cada vez más anecdóticas.
No sorprende el interés de estas ligas en organizar un torneo cerrado para ellos mismos. En la práctica lo que buscan es un torneo que genere máximo interés todo el año, no sólo en su fase final. Los equipos de Polonia, Rumania, Suiza sobran en la gran fiesta del fútbol europeo.
La excesiva concentración de la riqueza fruto de cambios regulatorios impulsados por los propios interesados impacta la competencia y, en el largo plazo, puede afectar negativamente al mismo fútbol. Es decepcionante que hoy por hoy el mundo no pueda disfrutar domingo a domingo de jugadores de la categoría de Arda Turan o James Rodríguez. Apenas son suplentes en los dos gigantes del fútbol español. Es deseable una mayor concentración? Terminaremos todos hinchas de 4 o 5 equipos? Qué bonito cuando un Malmo o un Celtic jugaban y hasta ganaban la Copa de Europa. Un sueño imposible en el futuro cercano.