Tags: Brasil 70; Brasil vs Uruguay; el gol que no fue; goles de Pele; Mazurkiewicz; Mexico 70; Pelé; Sacchi; Uruguay
En la eterna discusión acerca de que prima, si el espectáculo o el resultado, siempre he pensado que el espectáculo está por encima, así lo decía en la columna titulada precisamente Espectáculo vs., Resultado. Soy fiel creyente de que un aficionado paga una boleta para ir a ver a su equipo dar un espectáculo, y si, puede que el equipo cumpla con ese triste axioma futbolístico convertido en frase de cajón: “jugamos como nunca y perdimos como siempre”. Pero como lo decía en esa ocasión, un aficionado perdona más fácil una derrota cuando ve que su equipo tuvo argumentos, cuando ve que trato de dar espectáculo y dio buen trato al balón.
El mismo Arrigo Sacchi sobrepone el estilo por encima del resultado y dice que los equipos que jugaron bien al fútbol serán más recordados independientemente de si ganaron o no. Y reitero mi ejemplo de Francia 82⁄86, Brasil 82, Dinamarca 86 y Holanda 74⁄78.
Pero también hay jugadas que demuestran la belleza del deporte, jugadas que quedan en la memoria por que plasmaron la belleza de este deporte, porque todos hubiéramos querido que fueran algo diferente. Y que mejor ejemplo para demostrar que el espectáculo está por encima del resultado que una jugada en particular. En la historia de los mundiales se han marcado 2,067 goles, y los hay de todos los calibres, pero por encima de muchos de esos 2,067 goles seguramente los amantes del fútbol recordamos una jugada en particular que no fue gol pero que debió serla, y que no podía salir de otra figura que no fuera del Rey del Fútbol, de Pele. Jugaban Brasil y Uruguay en México 70, un clásico de la historia de los mundiales. Con el partido ya a favor de Brasil, Tostao ve como Pele viene entrando por la derecha, pone un pase al vacío y el arquero Uruguayo entre el pánico y la desesperación sale al encuentro de Pele, y allí llego una de las más bellas jugadas de la historia de los mundiales, Pele siguió de largo y Mazurkiewicz se olvidó del balón y siguió tras el 10 brasileño pero su desconcierto fue el que lo dejo allí tirado en el camino al ver que el balón no iba con el jugador, Pele dio un rápido giro en su carrera, rescato el balón y en un tiro cruzado que también engaño al defensa que venía cerrando, se fue cerca del vertical…… Si hay alguna jugada que todos (menos los uruguayos por supuesto) hubiésemos querido que fuera gol, es esa. La plasticidad y elegancia de esa jugada que todos recordamos como el gol que no fue plasma el deseo de todo hincha, o bueno, el deseo frustrado pero el agradecimiento eterno al genio que se inventó la jugada. Seguro podemos olvidar goles, pero jugadas como esta quedan grabadas en la memoria del aficionado al fútbol.