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La prensa deportiva es amarillista, pero la prensa deportiva española es extremadamente amarillista, parcializada y aburridora. Los periódicos deportivos pasaron de ser eso, periódicos deportivos y representantes del periodismo que ante todo se debe destacar por la objetividad, la imparcialidad y la ética. En ese sentido es preferible leer la sección deportiva de El País, a leer diarios como Marca, As, Sport y Mundo Deportivo, que dejaron de ser diarios deportivos para convertirse en voceros e hinchas oficiales de sus respectivos clubes Real Madrid y Barcelona. Y ellos se llenan la boca culpando a Mourinho, Cristiano, Guardiola, Pique, Sergio Ramos, Dani Alves o cualquiera que se les ocurra, diciendo que incitan a la violencia y a calentar los ánimos, pero no hay nada de autocritica en sus palabras, no hay nada de objetividad en sus titulares, no hay nada de imparcialidad en sus editores y editoriales.

Empecemos por decir que siendo diarios de Madrid y Barcelona, uno supondría que defenderían o serian imparciales cuando se trata de los equipos de cada ciudad. La prueba mas grande es el espacio que le dedican a cada uno de los equipos;  mientras Barcelona y Madrid reciben grandes despliegues, Espanyol, Atlético de Madrid, Getafe y Rayo Vallecano pescan las pocas sobras que estos imparciales diarios les dejan en sus paginas tanto impresas como de internet.

Tienen la osadía de publicar la noticia en la que muchos presidentes de clubes se quejan del reparto de los derechos de televisión, cuando ellos mismos con su forma de actuar se prestan para que toda la atención se centre en estos dos equipos. Que fácil que resulta entonces criticar hacia afuera, que fácil es ser el dueño de los medios, que fácil que resulta mandar y prestarse para los que mandan. Es cierto que la prensa representa al cuarto poder, pero parafraseando al tío de Peter Parker en Spiderman: “con grandes poderes vienen grandes responsabilidades”,  y estos diarios si que se pasan por la nariz esa responsabilidad y la ponen al mejor postor, claro unos mas que otros, pero es infame la forma como insultan al lector, el maltrato que en muchas ocasiones hacen de técnicos, futbolistas, directivos, hinchadas, pero en especial, el maltrato que hacen a la VERDAD. Sin ninguna pena sacan las frases de contexto, publican noticias a destiempo con el solo fin de provocar, y parece que jamás hacen un juicio ético para valorar si con ello hacen daño o no. Entiendo que las noticias hay que publicarlas, que el periodista vive de la polémica, que el escandalo vende mas. Pero una cosa es eso y otra muy distinta es fabricar “verdades” a partir de frases de un discurso, frases del pasado o suposiciones que al final muchos lectores terminan aceptando como postulados verdaderos.

Y los ejemplos sobran, el mismo José Mourinho les puso en evidencia cuando durante un partido entre el Levante y el Real Madrid, a los jugadores del Real Madrid se les acuso de violentos, camorreros, busca pleitos y demás por ir a encarar a un jugador rival en un momento del partido. Mourinho les reto diciéndoles que cuando lo hacia la selección, en referencia al partido entre España y Chile, ello era un ejemplo de unión, de hermandad, de como sacaban la cara el uno por el otro, y cuando lo hace el Real Madrid entonces son unos bandidos.

https://www.marca.com/tv/?v=dHPuhV3f6Ob

Ni que decir del episodio con Neymar, cuando era casi fijo que ficharía por el Madrid, desde Sport se decía que seria imposible mantener dos egos como los de Cristiano y Neymar en un mismo vestuario, que Neymar era amigo de la rumba y un jugador díscolo. Pero cuando el panorama cambio y Neymar decidió no fichar por el Madrid y el Barcelona comenzó a ganar posibilidades de fichar al astro del Santos, entonces para Sport cada acto de Neymar era una prueba de su sencillez y humildad.

Ahora ha sido el turno de Falcao y Modric. El tigre, a quien la semana anterior su padre lo puso en una situación incomoda y los diarios nuevamente se prestaron para la polémica por encima del jugador, de la afición, del club y del respeto. La forma como trataron la noticia supuso la casi llegada de Falcao al rival de patio, y es es la mejor forma en que el Atlético ocupa los titulares de estos diarios. Que esfuerzos los que debe hacer este club para robarle un titular al Real Madrid. Ahora Falcao enfrentara una encrucijada y la ponzoñosa tinta de los periodistas de estos diarios que intentaran ver lo que nadie mas ve detrás de cada buena o mala presentación de Radamel. Modric por su parte fue victima de sus declaraciones del pasado, cuando un día lejano en el que dijo que Cristiano era un buen jugador pero que se tiraba mucho, le convirtió en el villano de hoy: https://www.sport.es/es/noticias/liga-bbva/dia-que-modric-rajo-cristiano-2198257

Ese uso indiscriminado de ese poder, que en el caso de los políticos es gravemente castigado, en la prensa pasa impune y la libertad de prensa se convierte en una delgada línea que fácilmente atraviesan muchos de esos medios para atacar, tergiversar y ofender, para luego pasar la línea hacia el otro lado y esconderse detrás de tan noble principio como lo es la libertad de prensa y expresión. No hay ningún límite para convertir en villano a quien quieren ni en héroe a quien consideren. Pensemos no mas en los repetidos clásicos de Barcelona y Real Madrid de las temporadas anteriores y la forma como los medios contribuyeron a calentar los ánimos con preguntas cargadas de segundas intenciones, titulares venenosos y editoriales que más parecían escritos por hinchas furibundos que por periodistas entregados a su causa.

FIFA quiere juego limpio, que la violencia se aleje de las canchas, de las tribunas y que los estadios vuelvan a ser un templo de diversión donde si bien hay una rivalidad, esta se dirime durante el juego y bajo unas reglas y jamás a través de la violencia ni en el campo ni en las tribunas y mucho menos en los micrófonos o la prensa escrita porque su influencia sobre los hinchas es alta.

El ejemplo lo deben poner ustedes señores periodistas, demuestren que pasaron por una facultad, que recibieron una clase de ética profesional, pero aplíquenla. Muestren que realmente existe una diferencia entre un periodista profesional y un hincha con acceso a los medios.