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A pesar de la victoria sobre Dinamarca, un halo de preocupación invade a la delegación portuguesa. Ronaldo no metió gol, se comió un par y, para rematar, terminó hablando mal de Messi quien a esa hora debía estar de vacaciones eligiendo la cuna para el bebé que llega. Ronaldo se desespera por no meter goles, porque le gritan “Messi, Messi” y, sobretodo, porque sabe que se está jugando el Balón de Oro.

La tabla de arriba ilustra el problema de Ronaldo. Obviando la Eurocopa, Ronaldo acierta entre los 3 palos aproximadamente el 40% de sus disparos. Sea con el Real Madrid o con la selección. En la Eurocopa su porcentaje de acierto a portería es muy superior, llega al 70%. No es que haya disparado más. De hecho, los 5,5 disparos por partido que lleva en la Euro está por debajo de su media en el Real Madrid y es, aproximadamente, su promedio con la selección.

¿Cuál es entonces el problema? Simple. Tal como se muestra en el mapa de calor que produce la página Web de la Liga BBVA, Cristiano está disparando desde fuera del área en posiciones poco ventajosas. La imagen es para el partido contra Dinamarca y si bien es cierto que falló lo que no suele fallar, también lo es que las demás opciones están siendo muy forzadas. Por ejemplo, el mapa de calor del partido contra Alemania demuestra que en el primer tiempo, Ronaldo no pisó el área rival. En el partido contra Dinamarca, como se observa, Cristiano no llegó a pisar el punto penal.

La conclusión es sencilla. Seguramente él o sus allegados ya la conocen. O deja el desespero, o este verano pierde el balón de oro.